El fundador de Wikileaks, Julian Assange, ha declarado en una entrevista que China supone el mayor peligro para su web, y ha desmentido las acusaciones que pesan sobre Bradley Manning de haberle proporcionado la información.
Cuando pensábamos que Julian Assange consideraba a Estados Unidos como su principal enemigo, el fundador de Wilikeaks ha asegurado que China es el país más peligroso para sus intereses, ya que su nivel de censura en materia tecnológica es altísimo.
El activista australiano ha denunciado que “China tiene unos métodos tecnológicos de intercepción de la información muy agresivos y sofisticados” que le permiten controlar la información que reciben sus ciudadanos del exterior.
Assange ha declarado que han “estado luchando para conseguir que la información de Wikileaks pueda saltar la censura del país asiático, y en la actualidad hay numerosos métodos mediante los cuales los chinos pueden entrar en nuestra web”.
En lo que se refiere a las acusaciones que pesan sobre el soldado americano Bradley Manning de haberle conseguido los documentos de Wikileaks, Assange afirma que son falsas, pero sospecha que todo es un plan para “forzar una confesión en la que declare que conspiró conmigo para dañar la seguridad nacional de los Estados Unidos”.
Al ser preguntado por los documentos que todavía no han visto la luz Assange reveló que hay archivos sobre el magnate Rupert Murdoch, dueño del gigante de la comunicación NewsCorp.
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